Gotas de Ilusión

                                      En la película ‘Instinto’ hay una secuencia muy violenta en la que Anthony Hopkins pregunta a Cuba Gooding (inmovilizado por el cuello) con un bolígrafo pinchándole en el cuello:

-¿Qué es lo que más duele que te quiten?-

A lo que el pobre psicólogo tras varias respuestas erróneas contesta:

- La ilusión – (más o menos son las palabras empleadas por ambos).

Así es, la ilusión nos mantiene en pie ante huracanes, tormentas o naufragios…

¿Definirla en algo concreto?

               Un título universitario, un puesto de trabajo, un viaje, hijos, tu pareja, un amante, cargos políticos, un animal de compañía, un premio, un quedar el primero, pintar un cuadro, tener salud, comida, trabajo, estar junto a los seres que han emigrado, poder divorciarse, ir sin burka, escribir sin censura, volver a andar, ver, sentir…

              Cuando se consigue una ilusión, al día siguiente la cabeza ya tiene una lista nueva. O no. En ese caso estás jodido, porque sin ilusión es muy difícil vivir. Nuestros politicastros se llevan el oro (también literalmente) en el arte de la desilusión. Todos han defraudado respecto a su comportamiento desde hace décadas; en cuanto llegan a la poltrona se olvidan de sus promesas e ideología (si es que hubo alguna claro).

              De los grupos financieros-empresariales que decir… de alguien, cuya máxima es acumular poder exprimiendo sin límites (gracias CCOO y UGT) a los de siempre. Grandes riquezas en manos de grandes estúpidos que no se llevaran nada (salvo la ilusión de un mundo mejor) al cementerio y sus descendientes tardarán poco en derrochar lo heredado…

             No quiero terminar de forma tan negativa este lunes… Desearía que encontraseis vuestra ilusión, si no aparece por ningún rincón del alma; aprended de los niños, maestros de la ilusión. También cualquier discapacitado down, puede darnos alguna clase particular cuando la necesitemos…

             Yo tengo la suerte de tener cada día clases particulares de ilusión, hay que ejercitarla (con pequeñas ilusiones) como en cualquier disciplina deportiva o intelectual; que nadie se engañe.

Dejo una instantánea de ilusión en el Retiro, en la que volar un pequeño helicóptero una mañana de domingo lluviosa; se convirtió en lo mejor del día para los que estábamos allí.