Hay cosas que tienen que serlo, ante la terca ignorancia de lo evidente. Así; en nuestro lugar secreto, dejan de serlo y podemos disfrutar de su realidad… Y algún día dejarán de inspirar poesías.
MI SECRETO
Hay una cosa que guardo entre poesías,
Donde nace la luz, el agua, la música…
Apenas cabe en más sitios,
tiene alas, escapa por las rendijas,
por los poros de mi ser.
Vivo preso de un azul de ojos,
de un beso escondido en sus labios,
de su voz libre que para mí es música,
de su larga melena, almohada donde duermo,
su perfume es la raíz de donde crecen los sueños.
Sueño con su piel, paraíso de mis dedos,
con mi boca que bebe de la suya,
y detrás su cuello, sus hombros,
bebo con suavidad, con dulzura, con anhelo,
su talle, sus ingles antesala de mi manjar,
sus piernas, sus pies,
como una abeja con el néctar de la flor.
Florecen sus pezones al paso de una caricia,
erguidos, rojos al fuego del deseo de mi lengua,
dejo caer mi cabeza en su vientre,
abandonada la cordura entre la ropa tirada,
nos perdemos el uno en el otro,
en un caos que forman las agonías,
en dos cuerpos celestes en la noche.
Y antes de desfallecer, del despertar,
de la triste, fría madrugada inoportuna,
me abrazo a mi secreto, a mi amor, a ti.
May-2006
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