Cuida tus Pensamientos porque se volverán Palabras.

Cuida tus Palabras porque se volverán Actos.

Cuida tus Actos porque se harán Costumbre.

Cuida tus Costumbres porque forjarán tu Carácter.

Cuida tu Carácter porque formará tu destino

Y tu Destino será tu vida...

_____________________________Mahatma Gandhi (1969-1948)

1/12/10

La Rebelión de los Hombres-rana.

Tela de araña sobre pueblo Suizo (Interlaken)

                                            Había un Hombre-rana que soñaba con abrazar a una mujer de carne y hueso.
             Todas las noches soñaba con la misma mujer, y cuando se despertaba lloraba.

             La luna miró en su corazón y vio que era honrado (cosa rara en los tiempos de hoy) así que le dio la oportunidad de encontrarse con Ella.
             En una mañana de marzo, cuando el campo empieza a oler a primavera y las ranas cantan al despertar, el hombre rana se despertó de sus sueños y tropezó con Ella.
             Al principio no se creía lo que estaba viendo. Alargó su mano y tocó la melena rizada de Ella. Olió su fragancia a viento del norte impregnada en su mano. Sus dedos rozaron su boca y un rayo atravesó su cuerpo de la cabeza a los pies. Ella sintió lo mismo…
                     El hombre-rana despertaba cada día y se encontraba con Ella cerca de la charca donde vivía. Su piel cambió de verde rana, a blanco pálido; pero sus piernas seguían siendo dos ancas.
             Probaron a juntar sus bocas y el sabor del beso les recorrió cada poro de sus pieles. Ella no desapareció al atardecer y a la luz de la luna dejó caer el vestido que cubría su cuerpo.Hicieron el amor como nunca lo habían hecho antes. Y él vio hecho realidad su sueño.

             Él la propuso salir de la charca, para vivir juntos un presente y un futuro conociendo atardeceres en  lugares distintos. -No es fácil tomar una decisión así.– respondió Ella.
Él la confió un secreto – cuando salga de aquí, mis ancas se volverán otra vez piernas.-

             Pasaron un par de años y cada vez eran más molestas las ancas de rana… No podían ir de la mano, ya que Él andaba a saltos, por mucho que intentaba seguir el ritmo de Ella.
             Paseaban por caminos conocidos y anchos, siempre los mismos. Un día Ella se dio cuenta que caminaban en círculos sin llegar a ningún lugar.

- Está bien hombre-rana, me iré contigo lejos de la charca, quiero descubrir como son los amaneceres de otras tierras..!- dijo con una sonrisa dejandolo boquiabierto.
- Está bien deja que lo piense un rato.- Respondió el hombre-rana.

                     La respuesta dejó helado su corazón, tanto; que lo dejó meditando su decisión y se fue andando al lugar de donde vino.
             El hombre-rana se quedo solo con sus dudas y sus ancas. Temía que lo que le decía su corazón (que sus piernas volverían al abandonar la charca) fuese mentira, y al pasar el tiempo, Ella se cansase de caminar con un hombre-rana.
             Lo que pasó fue que Ella conoció a otros hombres con piernas y bailó con ellos hasta altas horas de la madrugada, pero ninguno, cuando la besaba, hacía que un rayo la atravesase las entrañas.


             Volvió decidida a coger de la mano a su amado hombre-rana y disipar todas las dudas y miedos que pudiese tener con respecto a Ella o Él mismo. Cuando llegó a la charca se encontró con su hombre-rana atrapado en una tela de araña invisible que poco a poco le estaba asfixiando.
             Buscaron a la araña por todas partes sin encontrarla, y al final se dieron cuenta que los hilos salían  de las dudas y pensamientos que habitaban en la cabeza de Él.

Quizás, leyendo este cuento deje de pensar tanto con la cabeza y deje que actúe su corazón.

Un abrazo fuerte para mi querido Hombre-rana.


Corazón Oxidado
Fito y Fitipaldis

"Todo se derrumba y es tan fácil
Todos mis castillos son de arena
Todo lo que sueño es tan frágil
Todo lo que bebo es tu ausencia...

Y mi pobre corazón de hierro
Se me fue oxidando con las penas
Es que tengo sueño y no me duermo
Este fuego que ya no calienta"

Mi pobre corazón oxidado
Mi pobre corazón encogido
Mi pobre corazón todo el daño
Mi pobre corazón todo lo bueno vivido
Mi pobre corazón lo mas malo
Mi pobre corazón lo divino, lo valiente, lo cobarde, lo esperado, mi virtud y mi defecto, mi barranco y mi camino.

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Virginia Woolf (Londres 1882-1941) Novelista y Ensayista británica

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