Alma Abierta

Mucho talento (Artículo de Ángela B. el 29/ dic/ 2010 en ADN)

De nada vale que el entendimiento se adelante, si el corazón se queda", dijo Baltasar Gracián. ¡Cuánta razón tenía!

Ha llegado el final de este annus horribilis lleno de desaciertos políticos, crisis mundiales, depresiones y quebrantos personales. Quedamos todos, después de este tsunami de vivencias colectivas, desnudos y expectantes frente al año que empieza.

Hemos perdido mucho. En las grandes contiendas algo siempre se pierde. Volvemos a encontrarnos desnudos, ante el espejo íntimo que nos mira y nos cuestiona. Qué bello que la grandeza del ser humano esté en su fondo, en esa fuerza que aparece en el momento en que más hundidos nos encontramos. Aquello que nos dice que sí, que aquí estamos, que la vida vale la pena vivirla para equivocarnos y rectificar. Para crecer y aprender de otros lo que por nosotros no sabemos.

Se acaba el año, pero es sólo uno de los muchos que nos quedan por vivir. Ojalá el 2011 nos regale sabiduría para aprender a conocernos a fondo; para reconocer en nosotros las capacidades que tenemos para ir en la búsqueda de una vida llena y no desperdiciar energías en metas fallidas. Que seamos capaces de dirigir nuestro camino sin esperar que sean los otros los que lo hagan. Que se unan y vibren al unísono razón, sentimientos y voluntad.

Ojalá el talento nos bendiga con su sentido común: "De nada vale que el entendimiento se adelante, si el corazón se queda". Feliz 2011.